Atractivos turísticos alrededor de Puerto Montt
|No es muy común que una ciudad se destaque más por sus proximidades naturales que por la riqueza que envuelve su zona céntrica. El caso de Puerto Montt, una de las quince capitales chilenas, se vuelve relevante en este sentido.
Apreciada por sus admirables paisajes boscosos y adornado por decena de lagos, estuarios e islas, Puerto Montt se destaca por ser atractivo turístico para los visitantes que aman la vida al aire libre; pero, sobre todo, la pesca de embarque.
La costa de la ciudad capital impacta por el enorme y monumental mar, donde se ofrecen excursiones para recorrer y visitar cada una de las islas y estuarios distribuidos por este pasaje marítimo. También, existe la posibilidad de rentar vehículos para transitar la costa de punta a punta, por tierra. El arriendo de autos en Puerto Montt, es uno de los servicios más contratados por los turistas que llegan al lugar.
La mayoría de los trayectos trazados, algunos a más de seis horas de navegación, desembocan en pueblos de pescadores y agricultores que viven de la riqueza marina y los cultivos de la tierra.
Cercano a Puerto Montt, también, existen decenas de caletas, que se convierten en el ambiente ideal para la industria salmonera, desarrollada conjuntamente con distintos emprendimientos turísticos, como el segmento gastronómico, que propone una amplia gama de restaurantes con comidas típicas, convirtiendo a la zona en un atrayente polo culinario.
Puerto Varas y Puerto Chico, sobre el lago Llanquihue, son los grandes puntos turísticos elegidos por los visitantes que desean conocer más sobre la historia de Puerto Montt. Se puede visitar, aquí, la Silla del Presidente, referida a Pedro Montt, quien fuera primer mandatario de Chile, en dos oportunidades, entre 1906 y 1910.
El Lago Chapo, a 43 kilómetros hacia el noreste de la ciudad, se destaca por su paisaje montañoso, donde se practica la pesca deportiva y se puede navegar por el estuario de Reloncavi. Además, en esta zona se encuentran varios parques nacionales, donde se pueden observar las últimas hectáreas del bosque milenario que afloraba a lo largo de toda la cordillera.
En la caleta La Arena (pequeña porción de mar que se interna en la tierra), al este de la ciudad, se puede disfrutar del paisaje marítimo y de los cambios que genera la marea. Al retirarse las aguas de la costa, cobran vida los recolectores de frutos y algas de mar que van recorriendo la orilla para recoger su cosecha. Además, pueden apreciarse restos de alerces petrificados enterrados en la arena.